viernes, 17 de febrero de 2012

Siria

Lo que está pasando en Siria es algo complicado de explicar. Al principio parecía que era lo mismo que en sus países vecino: una rebelión, el dictador/presidente cae y empieza una nueva era en el país. Sin embargo el caso de Siria se ha presentado como bastante diferente. En primer lugar está el pueblo sirio, que al contrario que en otros países islámicos, está dividido entre el apoyo a Al Assad y la lucha contra él. A pesar de eso, las protestas no han parado de producirse. El verdadero problema internacional se derivó de la reacción del presidente para aplacar dichas protestas. El gobierno sirio utilizo la fuerza del ejército para cumplir este objetivo, causando muertes en cada una de sus intervenciones. También a diferencia de los otros países árabes, la mayor parte del ejército sirio está a favor del gobierno de Al Assad. Debido a este inhumano procedimiento la ONU y los países más importantes empezaron a hacer presión internacional para conseguir el cese del presidente sirio. Pero este no hizo mucho caso ya que contaba con algo de ayuda de otros países, en concreto de Rusia. Por ello La ONU intentó disuadir al gobierno ruso de apoyar al gobierno sirio, sin conseguirlo. Y hasta aquí lega el tema. Al Assad no está desamparado pero a la vez se le hace mucha presión. No se sabe como va a acabar el asunto, pero esperemos que tenga, dentro de sus posibilidades, un final feliz.

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